Encuentran sin vida a un joven junto a una ofrenda en Potosí

Fisher Rodrigo Gutiérrez, un adolescente de 14 años, fue encontrado sin vida el pasado viernes 2 en una quebrada del Río Penitencia, en el municipio de Villazón, Potosí, fue “asesinado y usado” para un ritual, denunciaron sus familiares.
El muchacho desapareció el 22 de marzo, después de salir de su casa cerca de las 17.30 para participar en el desfile de teas que en homenaje al Día del Mar, el sábado 22 de marzo. Su familia, al no tener noticias de él pues no retornó a su hogar, denunció su desaparición ante la División de Trata y Tráfico de Personas de la fuerza anticrimen del departamento de Potosí.
El padre de la víctima, también llamado Fisher Gutiérrez, y Danitza Gutiérrez, su hermana, aseguraron que el estudiante fue asesinado y usado como parte de una ofrenda ritual.
“Mi hermano era inocente, cómo es posible que le hayan hecho esto. Estos rituales suceden. Mi tío lo encontró cerca de las 17:00 muerto porque todos entramos al río”, se lamentó la hermana entre lágrimas.
Los familiares mantienen esa versión porque el cuerpo del adolescente fue hallado junto a dos cuencos de k’oa, cigarros fumados, parte del cuerpo de una gallina, lanas e hilos de colores, un aguayo y una vela negra con la imagen del rostro de un demonio.
La búsqueda de la familia se prolongó por espacio de 42 días, tiempo en el que hicieron largas caminatas hacia las comunidades Lampaya y Ojo de Agua.
También se dirigieron cerca del matadero, a su unidad educativa, a las casas de sus amigos e incluso, estuvieron sus parientes a punto de ingresar al departamento de Tarija, mientras que otros allegados colocaron afiches en la ciudad de Potosí.
El fallecido era el menor de ocho hermanos. Cursaba el segundo curso de secundaria. Su hermana aseguró que era estudioso, respetuoso y la mayoría de las veces se mantenía silencioso.
La familia Gutiérrez sospecha que un compañero de colegio del fallecido porque el día del desfile se encontró con él. Cuando fueron a buscarlo se enteraron de que un abogado lo defenderá.
El sospechoso tiene 17 años y estudia en la misma unidad educativa de la víctima, aunque en un curso superior. “El que nada ha hecho, nada teme, seguimos en la Fiscalía para sabe más”, dijo la hermana, compungida por este deceso trágico.